El
fin de semana pasado comenzó un nuevo torneo de nuestra querida liga de fútbol;
fútbol que se ha desarrollado en nuestra naciente república como una
distracción necesaria de las clases sociales bajas que, desamparadas del
antiguo Estado, se encuentran con un libre albedrío que no conocían. Pero no nos
desenfoquemos pues como ya nos tiene acostumbrados, el Lokomotiv Krev ha tenido una espectacular actuación y ha
apabullado al BfV Krov no solamente
con 5 goles, sino además mostrando una gala de toques y actuaciones
individuales descollantes. Sin embargo y ya que todos escribirán páginas y
páginas sobre el equipo más popular de nuestro país, quisiera comentarles una
grata sorpresa que nos ha deparado nuestra segunda división.
Érase
una vez un club de fútbol que, a espaldas de sus hinchas, fue vendido a los
nuevos ricos que pululan tras la caída del comunismo como forma de vida. Uno de
ellos no encontró mejor forma de aumentar su fortuna que intentando blanquear
dinero con el humilde, y querido Rev
United; habiendo sido descubierto por las autoridades, lo dejó a la deriva y
huyó más allá del que alguna vez fuera el muro que dividía las ideologías.
Y
como todos nos transformamos en capitalistas de la noche a la mañana, los
jugadores y el cuerpo técnico nuevamente
a escondidas de los hinchas,
comenzaron a amañar partidos y transformar todo resultado posible en una fuente
de ingreso a través de las apuestas; esto ocurrió hasta hace dos años atrás y
claro, tanto va el cántaro al agua, el tema fue descubierto y el club,
incluyendo a jugadores y cuerpo técnico, fue sancionado con una caída a la
tercera división y con la expulsión de la liga de todos los involucrados.
Y
aquí es donde ingresa la diosa fortuna.
Como ya nadie quería estrujar al club fundado en 1973, los hinchas- los
verdaderos- retomaron las riendas, hicieron colectas en toda la ciudad de Rev,
provocando en cierto modo, la segunda revolución que había presenciado
esa urbe y sus habitantes en pocas décadas, logrando recaudar los fondos
necesarios para mantener a flote el club. Pero la diosa no se detuvo ahí, ya que tras la gran trifulca de nuestra tercera
división - que por supuesto todos recordamos, no sin la vergüenza retratada en
la cara- el Rev United, por
secretaría lograría el ascenso a segunda división, casi sin jugadores y con
clubes rivales desaparecidos por doquier.
Si
por algo este club es querido y reconocido en la ciudad es por esas escuelas
tan a la usanza soviética que buscaban encontrar talentos en territorios
remotos y entregar, a través del deporte, una nueva vida a sus familias. Con
una gran ligazón a Cuba, se buscaron talentos en Centroamérica y otras muchas
partes del mundo, dando a los pequeños con talento y a sus familias una
oportunidad de cambiar sus vidas proletarias por el cariño marxista de nuestro
país y en especial de la ciudad de Rev. Y resulta que este año, justo este año,
llamado el de la libertad del yugo,(a esta altura da lo mismo cual yugo), esos niños
y a falta de recursos, jugadores profesionales y un gran etcétera, se vieron en
la obligación de saltar al campo de juego a representar los colores de un club
al que están ligados por su pasado y por lo que pueda deparar su futuro; y lo
hicieron de una forma que nadie esperaría, menos este veterano periodista
deportivo: fueron a Slay, enfrentaron al veterano club FK Slay y lo golearon nada más que 6 a 0. Con un promedio de edad
de 17 años, los 13 jugadores que en total representaron al Rev United durante el partido, hicieron gala de que el amor amateur
hacia unos colores, a veces, sólo a veces, puede más que la monotonía del
profesionalismo y del deber mas no el querer jugar un partido de fútbol.
Al parecer este año la diosa fortuna les ofrece una oportunidad a estos muchachos y a esos relegados hinchas que, envueltos en las preocupaciones diarias de una naciente república, buscan su lugar extraviados en el salvaje capitalismo que años antes mirábamos de reojo.
Este artículo fue traducido al español intentando conservar la mayor fidelidad al original.
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